Tratamiento del Aire Comprimido

Cuando arrancamos un compresor, su misión es la de generar la cantidad suficiente de aire comprimido para hacer frente a las necesidades productivas de nuestra empresa. Esa cantidad de aire comprimido no solo está formada por aire sometido a una alta presión, sino que nuestro compresor ha absorbido todo el material que se encontraba en esa masa de aire.

Todo ese “material” genera que nuestro aire no sea puro, sino que contenga otros materiales, entre los que destacan el agua, el aceite o las partículas sólidas que contaminan nuestro equipo.

Una vez que nuestro aire comprimido empieza a recorrer nuestra instalación, empieza a generarse una contaminación que aumentará el riesgo de sufrir averías, colapsos y problemas de producción, sin tener en cuenta la propia contaminación que se genera cuando el aire comprimido se pone en contacto con el producto fabricado. Este hecho se vuelve viral cuando el aire comprimido se pone en contacto con productos alimenticios o relacionados.

Para controlar esta contaminación, haremos uso de la norma ISO 8573-1:2010 un documento que nos controla 3 parámetros: presencia de agua en red, presencia de partículas sólidas en red y presencia de aceite o derivados en red. Con la utilización de valores que oscilan desde el 0 al 6, podremos determinar la calidad de nuestro aire comprimido y cuantificar qué cantidad de agentes externos hay presentes en nuestro aire comprimido.

Por ejemplo, si usted precisa de un aire con calidad 1-4-1, estaremos hablando de las siguientes cifras:

Es importante destacar la existencia de compresores exentos de aceite, es decir, compresores que no van a añadir ninguna cantidad de aceite al aire producido, por lo que su calidad se marcará como “Calidad 0”.

Si usted trabaja en un sector con restricciones en la calidad de aire, desde EnergyAir podremos diseñarle su instalación de tratamiento para que cumpla con la legislación vigente de forma inmediata y poder así generar un aire seco, limpio y adecuado, con sistemas de comprobación y medición para determinar si dicha calidad se cumple a lo largo de la red de aire.

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