Si pensamos en la palabra fusible nuestra mente se desplaza hasta un cuadro eléctrico o nos imaginamos la típica tormenta eléctrica que nos deja sin corriente en casa, tal vez, no estamos pensando en algo muy extraño. Los fusibles neumáticos nos permiten salvaguardar la integridad física de las personas en caso de rotura de una manguera neumática.
¿Cómo funciona el fusible neumático?
Cuando disponemos en nuestra instalación de mangueras no rígidas siempre podemos tener el peligro de que, frente a una rotura de la misma, se produzca el denominado efecto látigo. Este fenómeno produce una serie de movimientos muy bruscos y violentos de la manguera que pueden provocar daños a las personas que se encuentren a su alrededor. Para evitar esto se instalan a lo largo de la línea los denominados fusibles neumáticos.
Estos dispositivos realizan un corte del suministro de aire en el momento en que en algún extremo del mismo se produzca una caída de presión, de tal forma que, anulando el suministro de aire, anulamos el posible efecto látigo que pueda provocar la manguera.
Su funcionamiento mecánico es muy sencillo, en el interior de los mismos se dispone una esfera metálica soportada en uno de sus lados por un muelle, ante el corte abrupto de presión, esta esfera cierra el suministro de aire de forma instantánea. Estos dispositivos deben de instalarse en la correcta posición con respecto al sentido de circulación del aire y tarados a la presión determinada a la que esté trabajando en la red.
Algo novedoso y que aumenta la seguridad de nuestras instalaciones no debe de faltarnos en nuestras instalaciones neumáticas. En EnergyAir disponemos de un amplio catálogo de fusibles.
