En el ámbito de los compresores de aire, existe una distinción crucial entre los modelos de velocidad variable y los de velocidad fija. Mientras que los compresores de velocidad fija son ideales para aplicaciones que requieren una carga constante del 100%, los compresores de velocidad variable destacan en entornos donde la demanda de aire comprimido fluctúa.
En el año 1994 Atlas Copco lanzó al mercado los compresores de velocidad variable y, desde ese momento, revolucionó la producción de aire comprimido.
La velocidad variable adapta la producción y el ritmo de trabajo del compresor a la demanda real, e instantánea, que el cliente tenga. Los variadores de frecuencia permiten que el compresor modifique su régimen de trabajo para ser lo más eficiente posible y evitar las zonas de mínima eficiencia, denominadas, zonas de descarga. Estas zonas de descarga son los momentos en los cuales el motor del compresor se encuentra trabajando sin producir aire comprimido.
1 – Ventajas de los compresores de aire de velocidad variable
El propio concepto de la velocidad variable habla por sí solo. Producir el aire comprimido que se demanda en cada momento. La tendencia actual de todos los fabricantes es producir aire mediante velocidad variable y, por ende, que en un plazo corto de años, todos los compresores que se comercialicen en el mercado sean de velocidad variable.
La principal ventaja es la eficiencia energética: de media, un compresor de velocidad variable es capaz de ahorrar hasta un 60% de energía eléctrica frente a un compresor de velocidad fija. Además, al reducir el régimen de trabajo y adaptarlo a la demanda, se alarga la vida útil de los compresores de forma exponencial.
Otra de las grandes ventajas de los equipos de velocidad variable es su flexibilidad. La zona óptima de trabajo de un compresor variable se encuentra entre el 60% y el 80%, teniendo en cuenta estos valores, se deduce rápidamente que el abanico de posibilidades que nos brinda un equipo de velocidad variable frente a posibles picos de consumo es muy elevado.
2 – Ventajas de los compresores de aire de velocidad fija
Los compresores de aire de velocidad fija son los más escogidos cuando se requiere un flujo constante de aire. Si hablamos de sus ventajas, partimos de que funcionan de manera óptima cuando operan cerca de su capacidad máxima, lo cual minimiza las fluctuaciones y maximiza la eficiencia energética a largo plazo.
Los compresores de velocidad fija son recomendados para entornos donde la demanda de aire comprimido es constante y predecible, ya que pueden funcionar sin necesidad de ajustes frecuentes.
Además, el costo inicial en este tipo de compresores suele ser menor en comparación con los compresores de velocidad variable, lo que los hace accesibles para negocios con presupuestos limitados.
Por último, una de las ventajas más destacadas es su baja necesidad de mantenimiento, lo cual contribuye a reducir los costos operativos y prolonga la vida útil del equipo.
Pros y Contras de Compresores de Velocidad Variable vs Velocidad Fija
Compresores de Velocidad Variable:
- Pros:
- Mejor eficiencia en carga parcial
- Adaptabilidad a cambios de carga
- Menor consumo de energía
- Depósito de aire más pequeño
- Control preciso
- Contras:
- Mayor costo inicial
- Requerimientos técnicos más avanzados
- Armónicos en la red de suministros
- Posibilidad de interferencia electromagnética.
Compresores de Velocidad Fija:
- Pros:
- Costo inicial más bajo
- Mejor eficiencia a plena carga
- Simplicidad operativa
- Adecuados para cargas estables.
- Contras:
- Menor eficiencia energética en cargas parciales
- Muchos arranques y paradas
- Mayor desgaste por arranques frecuentes
- Mayor tiempo de descarga
- Depósitos de aire de mayor tamaño, debido a amplia banda de presión.
¿Qué tipo de compresor debo elegir?
En EnergyAir somos especialistas en la realización de estudios de eficiencia energética en salas de compresores. Actualmente, hemos desarrollado proyectos en los que algunas de las cifras son realmente sorprendentes:
- Amortizaciones de maquinaria en un período inferior a 12 meses
- Ahorros energéticos superiores al 35% sobre la facturación de energía eléctrica
- Posibilidad de captación de subvenciones por la sustitución de equipos de velocidad fija por equipos de velocidad variable.
Siendo realistas, la producción eficiente de aire comprimido está íntimamente ligada a los equipos de velocidad variable.
La producción eficiente de aire comprimido se logra mejor con equipos de velocidad variable.
Pero, la elección entre compresores de velocidad variable y velocidad fija también depende de factores como la variabilidad de la carga, objetivos de eficiencia energética y el presupuesto disponible.
